Escrito por Carlos Jonay Suárez, co-fundador de Pueblos Remotos.
Estaba dándole vueltas a por donde empezar a redactar este post, así qué, sin más, me voy a liar la manta a la cabeza y voy a empezar por el principio.
Hace unos días, mientras teníamos una conversación Elsa (co-fundadora de Pueblos Remotos, y asidua a redactar en este blog) y yo, surgió el tema de ‘si le estábamos dando demasiado peso al teletrabajo’ dentro de la comunicación de Pueblos Remotos.
Eso me hizo pensar, y replantearme, que quizás sí que estábamos poniendo demasiado empeño en esa parte, y a pesar de que la ruralidad conectada, como ya te hemos contado en más ocasiones, va de la combinación entre teletrabajo y entorno rural, creo que en ocasiones puedo pecar de centrarme demasiado en lo primero.
Pero, nada más lejos de la realidad, esto,Pueblos Remotos, es algo más que teletrabajo y paisajes que te quitan el hipo, esto también va de ruralidad y, sobre todo, de los actores que se encuentran dentro de la misma.
No lo llames ‘storytelling’, llámalo historia
Dentro del mundo de la comunicación digital, los anglicismos son el ‘pan nuestro de cada día’ (no sé qué me pasa hoy con los refranes, la verdad) y hay uno que destaca por encima de todos: el ’storytelling’, ó, traducido al ‘castellano’: contar una historia (de tu marca, producto, servicio, etc.)
Cuando trabajas en estrategia digital y quieres conseguir resultados diferentes en la parte de comunicación, siempre tienes que investigar, indagar y preguntar (como si no hubiera un mañana) para conseguir los elementos necesarios con los que construir ese ‘storytelling’ que hará a tu producto ‘único’, eso que lo diferencia de todos los demás.
Sin embargo, ahora que me planteo esto con cualquiera de las ediciones que hemos hecho, y por ende, con Pueblos Remotos Fuencaliente, ese ejercicio es casi innecesario. ¿Por qué? Pues porque aquí las historias son personas, y ese ’storytelling’ ya está construido con sus propios porqués: por haber seguido con una tradición familiar, por haber roto con todo, volver a sus raíces y emprender desde el sitio que les vio nacer, ó, por perderse, para encontrarse en un lugar en el que vivir un nuevo día a día.
¿Qué mejor ‘storytelling’ hay que tu propia historia?
Esto va de personas… y de sus historias
Sí, me has pillado, la frase, ‘esto va de personas’, ya la he usado antes, es verdad. Pero, diré en mi defensa que es la realidad que siempre nos hemos planteado. Pueblos Remotos surgió para unir a personas, para generar situaciones en las que puedan interactuar, conocerse, parar, conversar, escucharse, dialogar y crear.
Esto va de aprovechar oportunidades y de construir relaciones humanas, ¿para qué si no, te irías durante veintiún días a teletrabajar con otras personas y a conectar con actores locales? Ese human centric del que tanto se habla en clave empresarial, es nuestra premisa principal en Pueblos Remotos.
Por este motivo, quiero presentarte a nuestros cuatro actores locales, de Fuencaliente, de una forma diferente, ya que todos ellos tienen una historia detrás y una realidad por delante, y de una forma u otra, todas ellas forman ya parte de nuestro proyecto.
Jordan Acosta
Jordan es un joven emprendedor de Fuencaliente, y su historia está relacionada con la repostería tradicional de la isla de La Palma y más concretamente, con la de este municipio. Él representa a la tercera generación que ha apostado por un negocio familiar, de producción humana y cercano al pueblo, a la gente que consume sus productos.
El negocio que representa Jordan, Dulcería Mi Gusto, no es sólo un local de repostería, es un rincón que cuenta una historia que se ha transmitido de madres a hijos, y que mantiene viva una parte de la esencia de este municipio palmero.
Vicky Torres
Vicky también representa a un negocio familiar y en esta ocasión, a la quinta generación en ‘meterle mano a la tierra’ y producir un vino que hace las delicias de quien lo prueba.
Además, ella es la primera mujer a cargo de la Bodega Juan Matías Torres, algo que ha dotado a la misma de otro carácter y otra forma de hacer las cosas. Por eso, cuando pienses en su bodega, no pienses sólo en un vino que puede deleitar tu paladar, piensa en la historia que cuentan todas esas viñas, en las conversaciones que han surgido a su alrededor, y el esfuerzo que se ha realizado para mantenerlas todas esas generaciones.
Gustavo Díaz
Gustavo pone el toque diferente, y consciente, desde un prisma artístico. La artesanía, tan necesaria en todas sus formas para mantener historias y tradiciones vivas, es un arte que se encuentra en extinción en muchos pueblos y rincones de España. Mantenerla viva, es por lo tanto, una responsabilidad.
Herrumbre Vivo, el proyecto de Gustavo, trabaja con hierro reciclado, un material que cuenta múltiples historias, y que gracias a su talento y desempeño, nos muestra nuevos relatos con cada escultura qué hace. Por ello, cuando pienses en Herrumbre Vivo, hazlo también en el concepto, en la sostenibilidad y en lo que cuenta cada material.
Juan José Santos
Juan José pone sobre la mesa un toque de cordura y una realidad que cada vez está más presente en nuestro día a día: ser capaces de producir nuestros propios alimentos. En una entrevista que pude leer de él, y de forma muy acertada, decía que tenemos que empezar a potenciar el autoconsumo, no como un remedio temporal, sino como una opción y un pensamiento de futuro.
Con Palma Oliva Almazara, Juan José no sólo representa el introducir un nuevo producto diferencial en el municipio de Fuencaliente, sino que representa la ‘transformación y el cambio’ después de la ‘catástrofe’. Palma Oliva surgió después de que Juan José perdiera todas sus viñas en un incendio en el año 2009, así que cuando pienses en este proyecto, no pienses sólo en aceite, o en aceitunas, piensa en el esfuerzo, en la visión y en el sentido que él le da en su día a día.
Una historia común
Todas estas historias tienen un hilo conductor común, como es un paisaje y un entorno que también tiene su propia historia. Una historia de un municipio forjado entre volcanes, un municipio que ha crecido (literalmente) y que se ha reconstruido en múltiples ocasiones.
Por estos motivos, y algunos más que ya hemos compartido contigo, ¿no consideras que Pueblos Remotos Fuencaliente puede ser un destino para que construyas una nueva historia?