La pregunta recurrente si tienes cualquier producto, o servicio, en el mercado ¿verdad? Y si no te la haces, tienes un problema, porque tus clientes, o usuarios, se la van a hacer siempre.

La pregunta a la que me refiero es: ¿Cuánto vale [lo que sea que hagas/vendas]? En nuestro caso, esa pregunta concreta es ¿Cuánto vale participar en una experiencia de Pueblos Remotos? (a la que yo le sumo, pero eso lo dejo para otra ocasión ¿Cómo transmitimos todo lo que se vive en una experiencia de Pueblos Remotos?)

Quiero decir de antemano, que lo que vas a leer a continuación no es un blog post justificativo, ni nada más lejos de la realidad, lo que vas a leer es una exposición de todo lo que hace posible (antes, durante y después) que realizamos una experiencia y cuales son los impactos que generamos con ellas.

La importancia del entorno rural

Es algo que transmitimos siempre en nuestras comunicaciones y la piedra angular de nuestras experiencias: el entorno rural y que todo suceda dentro del mismo.

Para nosotros, el entorno lo es todo, es lo que nos ayuda a generar auténticas experiencias de conexión y lo que te brinda la oportunidad de tomarte esa ‘pausa’ necesaria para conectar con otras personas y contigo mismo.

Los pueblos, o regiones, en las que desarrollamos nuestras experiencias con Pueblos Remotos son la base sobre la que sentamos todo lo demás y por eso forman parte de nuestra fase inicial de análisis, una fase fundamental para construir todo lo que hacemos y el aura que rodea a cada una de las experiencias que ponemos en marcha.

Si el entorno es la clave, el alojamiento es el ‘centro neurálgico’, es donde vas a convivir, a co-crear, compartir, charlar y conectar con otras personas que tienen inquietudes similares a las tuyas.

Estos alojamientos, como por ejemplo: Alberto Dorner, La Era de La Corte o la Casa Rural Los Melindros, no están escogidos al azar, son el resultado de comprobar (física y personalmente) que son los sitios ideales para desarrollar Pueblos Remotos Icod, Antigua y Fuencaliente.

Esa conexión va mucho más allá de contar con unos espacios magnificos, habitaciones cómodas, espacios con buena conexión a internet o una cocina completamente equipada, la conexión es también con las personas responsables de estos negocios, con el mimo y el cuidado que le ponen a cada detalle, o como nos ayudan a conectar con la comunidad local de cada uno de los municipios.

Puedes leer más sobre algunos de nuestros alojamientos en el blog post: Emprender desde la ruralidad: ejemplos de Pueblos Remotos (Parte 1)

Actividades que generan vínculos

Igual de importante que el entorno, es lo que sucede en él. Construir y co-crear actividades que te ayuden a conectar con el entorno rural y las personas que viven en él es una de nuestras partes favoritas. Explorar el territorio, ver sus rincones, conocer a los actores y actrices locales que van a formar parte de Pueblos Remotos (y van a ser parte activa de nuestra comunidad global) es un proceso muy enriquecedor.

Cuando estamos creando todo esto lo hacemos visualizando cómo vas a vivir esas experiencias y lo hacemos de la mejor forma posible, viviéndolo directamente. Nos gusta imaginar las caras de asombro, interés o curiosidad que tendrás cuando conozcas las historias detrás de cada proyecto, los porqués de seguir (o empezar) con ellos en lo rural y las sonrisas de complicidad mientras realizas las actividades.

Además, el impacto de las actividades se divide en dos tramas, ya que intentamos potenciar que nuestro impacto llegué lo más lejos posible en todo lo que hacemos:

• Actividades principales: son las que co-creamos con los actores/actrices locales y con las que generamos el vínculo directo con el territorio sobre el que actuamos.

• Actividades secundarias: son las actividades que puedes realizar con otros actores/actrices del municipio, que cuentan con experiencias muy atractivas, sostenibles y de conexión con el territorio.

A estas actividades que desarrollamos junto con los actores y actrices locales se suman otras dos actividades que hacemos desde Pueblos Remotos y que también creemos fundamentales en el desarrollo de nuestras experiencias: las sesiones de Team Building y de Skillshare:

• Team building: las sesiones de Team Building son experiencias como micro-talleres a través de los que colaboramos o hacemos actividades juntos. Todas van acompañadas de dinámicas para generar empatía y para que conozcas mejor al resto de tus compañer@s de experiencia.

• Skillshare: las sesiones de Skillshare son experiencias en las que un compañer@ (un@ de los teletrabajadores que forma parte de la experiencia) comparte su ‘expertise’ con el resto de compañeros. Pueden ser sesiones de productividad, mindfulness, marketing u otros.

Puedes leer más sobre algunas de las historias detrás de nuestras experiencias en el blog post: ‘Esto es mucho más que teletrabajo’

Proponer cambios que perduren

Algo que forma parte de las experiencias de Pueblos Remotos desde un primer momento es proponer cambios que perduren en el tiempo ¿Cómo proponemos esos cambios? Pues generalmente a través de la resolución, o identificación, de retos.

Como te decíamos en el primer enunciado, para nosotros el territorio lo es todo, y cómo impactamos dentro del mismo, también.

Por este motivo trabajamos para identificar retos en el territorio sobre los que poder trabajar en común durante las experiencias. El facilitar estos retos ayuda a generar espacios de trabajo en conjunto, colaborar mano a mano con los actores locales y dejar tu ‘granito de arena’ en el entorno rural.

Alrededor de los retos siempre suceden cosas ‘mágicas’, conexiones increíbles y un intercambio de conocimiento que va más allá del puro ‘aprendizaje’

Como ya definió Elsa en su blog post: ‘Los retos: pieza clave de la Ruralidad Conectada’, los retos son una forma de contribuir al territorio y de recibir una contribución del mismo.

El impacto que generamos (tú y nosotros)

Sí, esta ‘película’ no va de lo que hace Pueblos Remotos, porque cuando participas en una de nuestras experiencias, tú eres parte de Pueblos Remotos y de la Ruralidad Conectada. Pasas a formar parte de nuestra comunidad y con ello, del impacto que generamos en todas y cada una de nuestras acciones.

Como ya sabrás, y si no, te lo cuento, estamos detrás de un ‘nuevo’ concepto de economía: la Economía Social. Lo que significa que con nuestro modelo de negocio buscamos generar impactos que van más allá del mero intercambio comercial.

Como puedes leer en nuestro manifiesto, o en nuestra página Ruralidad Conectada, queremos generar un impacto que perduré en el territorio sobre el que actuamos.

Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)

Dentro de este blog post de Elsa: ‘¿Cómo contribuimos a los ODS con nuestras experiencias?’, puedes leer con detalle cuáles son los ODS que impulsamos y cómo, y porqué, estamos alineados con ellos.

También te dejo por aquí la primera definición de nuestros impactos, basada en los ODS:

Creemos que contribuir directamente a  los ODS debe ser nuestro día a día y que para conseguirlo solo hay que trabajar en ello. Desde Pueblos Remotos estamos muy alineados con los siguientes:

• ODS 8: Trabajo decente y crecimiento económico

• ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles

• ODS 12: Producción y consumo responsables

• ODS 17: Alianzas para lograr objetivos

Huella de carbono

Probablemente uno de los términos más comentados y vinculados con la palabra ‘sostenibilidad’ (sí, y con el ‘greenwashing’ de muchas empresas)

En nuestro caso, sabemos que muchas de nuestras experiencias conllevan desplazamientos (sobre todo viajes en avión) que tienen un alto impacto en términos de huella de carbono. Por ese motivo (y algunos más) nuestras experiencias duran 21 días, para intentar reducir al máximo posible nuestro impacto, al tiempo de generar acciones más ‘slow’ que te ayuden a integrarte en el entorno y en su comunidad.

Por supuesto, son muchas las acciones que podemos mejorar y estamos trabajando en ello para que nuestro impacto en términos de huella de carbono se reduzcan a la mínima expresión.

Impacto directo

Este es quizás, el segundo punto más importante de todo lo que hacemos y gran parte de nuestro ‘leitmotiv’: generar impacto con lo que hacemos ¿Qué clase de impacto? Pues de todo tipo:

Impacto cuantificable

Dentro del impacto cuantificable tenemos el impacto económico directo que generamos en el territorio y todos los datos que extraemos con nuestras experiencias:

• Dentro de nuestra misión, visión y valores está utilizar la economía y los recursos que generamos para mejorar la vida de las personas, por este motivo, entre el 75%-80% de nuestros presupuestos se revierten en las regiones sobre las que actuamos, generando economía local e impactando de forma directa en los negocios de los emprendedores rurales.

• Elaboramos informes de evaluación en los que medimos todos los impactos que generamos: retos en los que hemos trabajado, nuevas propuestas de soluciones para el municipio/región, impactos económicos directos o nuevos productos/servicios para diversificar las líneas de negocios de los emprendedores rurales, así como el feedback de todas las personas que participan en nuestras experiencias.

Impacto cualitativo

Este, por supuesto, es el más difícil de medir. Intentamos recoger parte de ese impacto a través de los testimonios de algunos de nuestros participantes. Blog post como los de Lucía, Javi o entrevistas como la que tuvimos con Álvaro, nos ayudan a entender ‘qué sienten’ las personas que participan. Pero siéndote cien por cien sincero, podría escribir durante 100 años y no saber cómo transmitirte con palabras qué es lo que se vive en una experiencia de Pueblos Remotos, por que cada persona lo vive de forma diferente y la conexión que se genera entre las personas que lo viven es algo muy personal y único. Quizás este blog post: ‘Sonreír es la clave’ puede ser una pequeña parte de lo que yo identifico, pero te aseguro que está MUY lejos de lo que podrás vivir formando parte de ello.

Puedes leer más sobre los impactos que generamos en el blog post: ‘Generando impacto positivo en el entorno rural’

Duración Vs Preparación

Otro detalle importante, y que ya te introducía con el análisis del territorio, es que para poner en marcha nuestras experiencias seguimos un proceso de 4 fases: análisis, captación, ejecución e impacto generado.

Por lo tanto, el precio que ves reflejado en nuestras experiencias no viene marcado por los 21 días que vas a vivir con nosotros, es el resultado de un proceso de meses de trabajo.

Si queremos generar un impacto real, y duradero, en todo lo que hacemos, tenemos que darle todo el mimo y dedicación que se merece.

Por este motivo, preparar una experiencia de Pueblos Remotos nos supone de cuatro a cinco meses de trabajo.